Desde pequeño lo tenía claro. Quería dedicarme a cuidar de los demás. Supongo que es algo heredado porque mi madre siempre nos ha cuidado a todos (a mis abuelos, a nosotros y también a mis hijos).
De pequeño, en más de una ocasión tuve que estar más de una vez en el Hospital, ya que todos “los bichos” eran para mí. Aún recuerdo cuando estuve ingresado en el Hospital San Juan de la Cruz de Úbeda en la planta de Pediatría. Le decía a mi madre que había una enfermera que me trataba de una forma especial, “mi enfermera”. Supongo que pasar tiempo viendo cuidar te hace sentir que cuidar es algo muy grande.
Yo siempre quise ser enfermero. En el colegio, cuando visité a la orientadora en 8º de EGB, recuerdo que a mi madre y a mí nos dijo, “su hijo lo tiene claro. Mi recomendación es que comience sus estudios como Auxiliar de Enfermería. De esa forma, podrá pasar pronto por un hospital, hacer las prácticas y hacer lo que más le gusta”. Le hice caso. Estudié Auxiliar, después Técnico en Anatomía Patológica, y por último, Enfermería. Lo tenía claro, eso es lo que quería hacer (nunca quise ser médico).
Las enfermeras, una fuerza para el cambio.
Como ves, hoy estoy un poco melancólico, pero es que ayer se celebró el Día Internacional de la Enfermera. Fué día y estoy muy contento (me puedes felicitar con retraso). Como cada año, el Consejo Internacional de Enfermeras lo conmemora, en este caso, bajo el lema: “Las enfermeras, una fuerza para el cambio: eficaces en cuidados, eficientes en costos”
Y claro, uno lee el documento de este año (1), “y se viene arriba”. Y más, cuando descubre (pásate por la página 32) que un documento de carácter internacional incluye resultados de investigadores enfermeros españoles. Concretamente, en relación a la gestión de casos, un modelo de servicio de atención a domicilio en el que la enfermera se ocupa de la gestión de los casos, que ha permitido homogeneizar el acceso a los servicios y los recursos sanitarios a la par que ha mejorado la capacidad funcional de los pacientes aliviando también la carga de trabajo del cuidador, todo ello con un mayor nivel de satisfacción (2).
No todo es celebración cuando nos queda mucha acción.
El problema es que justo cuanto tienes el lema integrado (y te lo crees), vuelves a la realidad del día a día donde piensas, “nos queda mucho camino por delante”. Y refuerzas esta opinión cuando, en el mismo documento, justo al final, lees estas conclusiones (por favor, no dejes de leerlas las conclusiones íntegramente):
A menudo se describe la enfermería como un ‘gigante durmiente’ que debe ser despertado para alcanzar todo su potencial. Esta descripción quizá sea especialmente adecuada en relación con la participación en la formulación de políticas de salud en general y la financiación de la sanidad en particular. Las enfermeras se encuentran en el corazón de la prestación de asistencia sanitaria pero se ven marginadas a la hora de realizar su contribución a la elaboración de políticas y toma de decisiones en el ámbito de la salud…
Hay una creciente evidencia de que las enfermeras obtienen resultados de salud tan buenos o incluso mejores en toda una serie de entornos clínicos; por lo tanto, su participación en la formulación de políticas es fundamental. Si se despertara la energía de los millones de enfermeras que hay con el pleno apoyo de los gestores y encargados de formular políticas y con su plena participación en las políticas, las enfermeras serían una auténtica fuerza para el cambio dirigido a la transformación de los sistemas de salud. Si se sistematizaran e implementaran los ejemplos ofrecidos, los beneficios financieros serían enormes. Los servicios eficaces en los cuidados y eficaces en los costos serían una realidad universal.
Las enfermeras siguen prestando cuidados con capacidad de recuperación y versatilidad y, a menudo, con pocos o ningún recurso o apoyo organizativo. La enfermería también se describe como la ‘espina dorsal de la prestación de atención de salud’. Sin embargo, parece que esta espina dorsal se está desmoronando a causa de la continua erosión y agotamiento de la energía. En este sentido cabe destacar la drástica reducción de la presencia de la enfermería en la sede central de la OMS (CIE 2013b). Sin embargo, la Asamblea Mundial de la Salud, el órgano de decisión supremo de la OMS, ha reconocido repetidamente que las enfermeras son fundamentales en la elaboración de políticas sanitarias de calidad y en la implementación de intervenciones eficaces en el ámbito de la salud. La creciente ausencia de la voz de enfermería en los Ministerios de Sanidad y en la OMS requiere ahora más atención que nunca.
…Con sistemas de salud rediseñados y la plena participación de las enfermeras en la formulación de las políticas, es posible transformar el paisaje de la atención sanitaria para mejorar el acceso a los cuidados, la seguridad del paciente y la calidad de los cuidados para todos (1).
Reseteamos el sistema sanitario y empezamos de nuevo.
Dicho esto, y confiando plenamente en las palabras del CIE, solo puedo pensar, decir y sentir, que ahora más que nunca, las enfermeras debemos abrir los ojos. Tenemos que despertar, actuar, decidir, colaborar y solicitar ese cambio al que se hace referencia: Un rediseño de las políticas que permita a las enfermeras situarse allí donde se deciden las cosas, simplemente, porque si no estamos, ¿como nos van a tener en cuenta?. La visión enfermera en las políticas de salud es necesaria. Y si para ello tenemos que DAR UN GRAN SALTO lo hacemos. Y si para hacerlo, debemos SALIR DE LA FAMOSA ZONA DE CONFORT, pues salimos. Y si nos tenemos que creer de una vez que somos FUERTES, pues sencillamente, NOS LO CREEMOS. Y no me digas que no puedes, porque estoy seguro de que PODEMOS.
Me gustaría terminar esta reflexión (emocionado) donde he recordado mis inicios y también, he podido divagar sobre el futuro de la profesión, poniendo en valor una cita de Doris Grinspun (Directora de la Asociación Profesional de Enfermeras de Ontario) que nos decía hace algunos años (3):
¡Ser enfermera es la mejor profesión del mundo!. Es un trabajo más importante que el de un político: la enfermera tiene la vida de las personas en la punta de los dedos. La enfermera cambia la vida de la gente.
¿Te imaginas a las enfermeras en la política, diseñando e implementando políticas de salud? ¿Cuántas vidas más tendríamos en nuestras manos y podríamos cambiar?
No te asustes, podemos hacerlo. Tenemos la mejor profesión del mundo. Solo nos queda, abrir los ojos.
Bibliografía:
(1) Consejo Internacional de Enfermeras. “Las enfermeras, una fuerza para el cambio: eficaces en cuidados, eficientes en costos” [Internet]. Ginebra (Suiza): Consejo Internacional de Enfermeras; 2015 [citado 10 Mayo 2015]. Disponible en: http://www.icn.ch/es/publications/2015-nurses-a-force-for-change-care-effective-cost-effective/
(2) Morales-Asencio JM, Gonzalo-Jiménez E, Martin-Santos FJ, Morilla-Herrera JC, Celdráan-Mañas M, Carrasco AM, García-Arrabal JJ, Toral-Lopez I. Effectiveness of a nurse-led case management home care model in Primary Health Care. A quasi-experimental, controlled, multi-centre study. Health serv Res [Internet]. 2008 [citado 10 May 2015];23(8):193. Disponible en: http://www.biomedcentral.com/1472-6963/8/193
(3) Victor-M.Amela. “Un país con buenas enfermeras será más feliz”. Doris Grinspun, Enfermera. La Vanguardia [Internet]. 2 Abr 2012 [citado 10 May 2015]. Disponible en: http://www.lavanguardia.com/lacontra/20120402/54279639102/doris-grinspun-un-pais-con-buenas-enfermeras-sera-mas-feliz.html
NOTA: Gracias a Fernando, y a su blog, Nuestra Enfermería por invitarme a participar en la iniciativa, 12Visibles12M, Enfermería a través de la Red, en la se nos invita a reflexionar sobre diferentes temas relacionados con los cuidados a través de la Red (que se aporta a la enfermería, el valor de este tipo de herramientas, como se hacen visibles los cuidados a través de la Red, etc).
Este post se publicó ayer en su blog y hoy, lo comparto con vosotros. En este sentido, quisiera recomendar al lector dos artículos donde podrá conocer nuestras reflexiones (las de los creadores de La Factoría Cuidando) sobre estos temas. Por otro lado, y como verás, me he permitido la licencia de utilizar un blog, el de Fernando, para difundir y compartir diferentes reflexiones sobre el pasado, presente y futuro de la profesión enfermera (una de las grandes utilidades de los blogs). No todos los días se tiene la oportunidad de escribir en esta gran casa.
Un cordial saludo.
Ramos Morcillo, Antonio Jesús; Fernández Salazar, Serafín. El blog: una herramienta para visibilizar y mejorar los Cuidados de Enfermería. Evidentia [Internet]. 2011 abr-jun; [citado 10 Mayo 2015];8(34). Disponible en: www.index-f.com/evidentia/n34/ev3400.php
Fernández-Salazar S, Ramos-Morcillo AJ. Comunicación, imagen social y visibilidad de los Cuidados de Enfermería. ENE, Revista de Enfermería [Internet] 2013 [citado 10 Mayo 2015];7(1). Disponible en: http://ene-enfermeria.org/ojs/index.php/ENE/article/view/256
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