Ultimamente entre cambios laborales, proyectos, compromisos, atenciones familiares necesarias… hacía tiempo que no aportaba una entrada al blog, pero la ocasión lo merece.

Os cuento, Enrique Castro (@castrocloud) es un enfermero que el otro día en Twitter abrió un amplio debate sobre el Doctorado en Enfermería y que permite plantearnos y/o replantearnos utilidad y necesidad de esta formación académica para el presente y el futuro de la profesión. Particularmente, he hecho un ejercicio de autocrítica y me voy a permitir compartirlo con todos vosotros.

Hacía referencia a la utilidad del Doctorado en Enfermería en la atención clínica o asistencial, y el debate se abrió fundamentalmente a raíz de  un tweet.

La frase abarca varias cuestiones, por lo que voy a aportar mi visión a partir de algunos puntos a destacar:

1)  Doctor en Enfermería frente a ser enfermera clínica o asistencial.

Enrique lo tiene claro, te tienes que decidir, o eres Doctor en Enfermería o eres enfermera clínica (me gusta más asistencial, a partir de ahora). Pero las dos cosas no encajan en esa “posible combinación óptima”, cuando realmente la utilidad del doctorado, como él aporta es “investigar, publicar y enseñar” y concretamente, “es logico- para ser profesor, piden doctorado. Y ya se sabe que los doctorados se obtienen para enseñar”.

Mi opinión es que si eres asistencial, no considero que se deba de vetar una oportunidad de seguir ampliando la formación y poder abrir líneas de investigación. Entiendo que cualquier formación, incluyendo este nivel de máster/doctorado, permite alcanzar cierto sentido crítico positivo para el desarrollo y autonomía profesional y eso, permitedme que os diga, es aportar valor clínico al cuidado profesional y diario con los pacientes. En mi caso, llevaba más de 17 años de enfermera asistencial (es decir, tenía plaza y tranquilidad laboral) y tras iniciar formación posgrado en metodologías de investigación varios años previos, la decisión llegó porque quería completar la línea de investigación iniciada previamente con la suficiencia investigadora en la Tesis Doctoral, cuestión que académicamente la entendía como la cuadratura del círculo. Incluso piensas que no todo termina con su escritura y defensa, vinculada como estaba la investigación a pacientes con los que trabajaba en la práctica asistencial.

2) ¿Un doctorado es beneficioso para la práctica clínica?

Para Enrique es un derroche profesional. Incluso reconozco que hay algunas compañeras que me han hecho esta pregunta al acabar“¿Para qué te sirve lo que has hecho?” Y lo que más me preocupa de estas preguntas es que nos la hagamos las propias enfermeras y nos cuestionemos que la formación en competencias investigadoras, y en habilidades y métodos de investigación, no nos van a servir para nada en el cuidado asistencial diario de mis pacientes. Pero, no todo es la competencia y habilidad clínica para ser enfermera asistencial. Yo estoy convencida que necesitamos también hacernos preguntas clínicas, potenciar el pensamiento crítico sobre el cuidado diario de los pacientes, saber buscar las respuestas orientadas a resultados en salud y desarrollar otras habilidades junto a las clínicas para cuidar mejor o al menos aspirar a ello.

Why not3) ¿Para qué vale? ¿Por qué hacerlo?

Enrique sigue preguntando, y para estas preguntas os puedo responder con mi experiencia personal. Yo pensaba que la línea de investigación abierta se iba a continuar (todavía aspiro a ello), y los consejos de uno de los integrantes del Tribunal en la defensa de la Tesis de darle una continuidad “necesaria”, era posible de alcanzar. Aunque luego te encuentras con la realidad y la falta de recursos económicos y de disponibilidad o liberación de tu tiempo profesional para dedicarte a seguir investigando. Lógicamente decides que ya no pones ni un duro más de tu bolsillo, e intentas rodearte de profesionales que les estimule continuar líneas de investigación o abrir nuevas, dentro de ciertos intereses y preferencias similares relacionadas con la investigación. Y a partir de estas valoraciones, se puede pensar que es un esfuerzo descompensado. Pero a esta afirmación os contestaré más adelante.

4) ¿En qué proporción de horas de clínica, investigación o docencia hablamos para una formación sin aplicación?

Realmente considero que un doctor académico no tiene por qué ser un buen investigador o incluso un buen docente, por haber superado este proceso, y estoy en desacuerdo con la idea de una formación sin aplicación como ya os he argumentado en mi primera respuesta sobre el beneficio para la clínica. Además añadiría que nos permite volver a la universidad y apreciar conjuntamente la academia, la investigación y la labor asistencial desde perspectivas que difícilmente alcanzaría sin esta vivencia formativa. Lo que si comparto es la necesidad de pensar que la labor de un doctorado debería ser poder seguir investigando y publicando resultados de investigación. Un amigo me decía “…pero piensa que no debes abandonar la actividad científica que ya iniciaste en su momento, que es lo que realmente tiene valor y es duradero y evaluable…”, y esto es una realidad que me quita el sueño pero que lógicamente precisa de apoyos económicos (financiación), profesionales e institucionales, e incluso si quiero aspirar a poder combinar la docencia universitaria con la actividad asistencial.

5) ¿Debe un doctorado puntuar en la bolsa de empleo único de tu comunidad o ambito asistencial?

La postura de Enrique es que “el doctorado no aporta ninguna habilidad clínica y por tanto no tiene sentido que puntúe” en una bolsa única de empleo. De manera que ante ese argumento de falta de habilidad clínica, es perfectamente comparable a aquellos médicos/as que trabajan en la asistencial, y han hecho el doctorado pero siguen siendo facultativos/as asistenciales, sin ninguna nueva habilidad clínica adquirida con el programa de formación del doctorado, basado fundamentalmente en materias que capacitan para competencias, habilidades y métodos de investigación (tal como ocurre, salvando las distancias, para el programa de doctorado en Enfermería). Es decir, ¿Alguien está cuestionando a los residentes en formación o médicos/as clínicas que inician su formación en el doctorado, que su doctorado no aporta ninguna habilidad clínica a su labor asistencial?

Pues parece que para responder a esta pregunta está la postura de la administración que también comparte la opinión de Enrique y decide que no tiene sentido que puntúe para Enfermería su formación en un doctorado. Me refiero a la información que da a conocer JM Santamaría García (@CheSantaGr) con el enlace a la Resolución de 30 de julio de 2014, de la Dirección General de Recursos Humanos por la que se dictan instrucciones sobre criterios para el nombramiento de personal interino en los centros sanitarios del Servicio Madrileño de Salud. La Comunidad de Madrid respecto al personal Facultativo del Hospital, establece el baremo 0,6 puntos si se tiene el Doctorado con RD 185/1985 o en programa de suficiencia investigadora o con DEA. Y si su nota en el programa de doctorado es de sobresaliente, suma 0,2, pero si además se obstenta el grado de Doctor se sumará 1,2 aunque se añadirá 0,4 si en la defensa de Tesis se ha obtenido la calificación de Sobresaliente Cum Laude. En mi caso, si la Comunidad de Madrid permitiera reconocer a Enfermería el mérito y la capacidad en igualdad de condiciones con otros profesionales la diferencia de baremo respecto a otra enfermera con las mismas competencias clínicas estaría en 0,6+0,2+1,4+0,4.

Pero hay una verdadera diferencia, si eres “Personal de categorías que cuentan con bolsa única centralizada: Las categorías que cuentan con bolsa única centralizada, como son Médicos de Familia y Médicos del SUMMA 112, Médicos Pediatras de Atención Primaria y Enfermeras se deberá tener en cuenta la puntuación que estos aspirantes tengan valorada en la correspondiente bolsa centralizada…” (donde no se puntúa el Título de Doctor en Enfermería o defensa de tu Tesis).

Es decir, como se comentaba en tweets posteriores con @InesNovellonUAH @CheSantGar @Alicia8m2ad el valor clínico de ser Doctor y la disyuntiva que hace que médicos y enfermeras se baremen distinto.

Point!6) Otorgar puntos en bolsa única de empleo ante la titulación de Doctor o Doctor en gestión de recursos…, ¿resulta una “chapuza ibérica”?.

Para Enrique esta posibilidad es un #quererynopoder Pero en mi opinión de enfermera doctora y de las propias enfermeras que defienden que esto sea una realidad, es un reconocimiento al mérito formativo y a la capacidad de enfermeras valoradas en igualdad de condiciones con otros profesionales sanitarios (cuestión que la administración se encarga de no considerar) y un elemento importante de evolución y desarrollo profesional. Para mi la verdadera chapuza es la falta de dinero, apoyos y oportunidades para investigar y que sea la propia administración o gestores o políticos, los que establezcan estas diferencias (discriminatorias) ante baremos puntuales para aspectos formativos adaptados a cada disciplina. Como diría Alicia Negrón (Alicia8m2ad) en respuesta a Enrique, “el doctorado no hace peor clínico y sí demuestra conocimientos… me parece mérito en todo sentido”.

¿Qué opináis de todo esto?, ¿Eres enfermera y quieres hacer el doctorado? ¿Te has planteado algunos de estos aspectos? ¿Si seguimos formándonos es una manera de alcanzar talento y valor profesional? ¿Serán los cuidados aportados a los pacientes de mayor calidad si son impartidos por Doctores en Enfermería? Se dijo en ese debate que este sería un estudio interesante, y a lo que Enrique responde, “…me encantaría ver los resultados de este estudio”, pero mi réplica viene en forma de pregunta, Si las enfermeras Doctoras no deben cuidar, pero si hacer docencia e investigación, ¿para qué hacer el estudio si todas las enfermeras doctoras estarían en la universidad?

(Cuando hablo de enfermeras, me refiero a enfermeras y enfermeros)

Un saludo, y gracias a @castrocloud @InesNovellonUAH @CheSantGar @Alicia8m2ad y muchos otr@s por enriquecer el debate. Nos leemos.

Actualización a08/09/2014.

Desde el día 30 de agosto se inauguró por un grupo de profesionales sanitarios una cuenta de twitter y un hashtag asociado a lo que parece que próximamente tendrá lugar y que son las Jornadas Virtuales sobre Doctorado en Enfermería (@JornadDoctorado  #JornadasDoctorado) Hay un google doc asociado a esas jornadas https://docs.google.com/document/d/10dny-BToBtulxNOstXEm21_JwTdGIIjc4bA6-FE0jlM/mobilebasic …  para aportar temas de debate y compartir inquietudes.

Creo oportuno que si has llegado hasta aquí tras leer este post, sería interesante que intentaras seguir ese espacio de debate por si eres aspirante a hacer el doctorado o doctorando o doctor, y deseas participar.
Yo la verdad es que sigo el hashtag con interés aunque desgraciadamente mi tiempo es limitado y no creo que pueda implicarme en participar, pero intentaré estar atenta a debatir o compartir aspectos interesantes.

Lo que si se han compartido son una cantidad importante de referencias bibliográficas que creo necesario aportar también por aquí para ampliar aspectos relacionados con los modelos de doctorado en otros contextos y otras cuestiones relacionadas:

Referencias interesantes al post, algunas extraídas de referencia al debate en twitter en torno a ese hashtag, así que muchas gracias a todos. seguiremos actualizando.

Virginia Salinas

 4,880 visitas

49 comentarios en “¿Es el doctorado en Enfermería un título in-necesario para ejercer como enfermera asistencial o clínica?”

  1. Creo que debemos acostumbrarnos a saltar barreras, a no tener límites… Y los límites no debemos autoimponérnoslos nosotros mismos como profesionales de enfermería. Cierto que para la práctica asistencial, quizá, hoy en día, un doctorado no sirva de mucho a una enfermera ni a sus pacientes. Pero un doctorado es el culmen de una investigación… que si se hace de forma correcta, y no las chapuzas de «pasada de mano» que he tenido la desgracia de conocer (para capacitar docentes, algunos infumables…), supone un proceso de investigación en una rama del conocimiento enfermero que no se debe de infravalorar. supone trabajo, esfuerzo, conocimiento. Mérito.

    Creo… y es mi opinión, que no se debe tratar por igual, ni en méritos ni en puestos ni en sueldo, a los enfermeros que se lo curran-que estudian-que investigan y a los que son tan útiles como una chaqueta de guardia colgada de un perchero, esos a los que les da igual ocho que 80… esos que, además, esperan recibir lo mismo que los que de verdad sí se esfuerzan.

    Creo que sí debería baremar un doctorado… ¡donde sea! Y que un día debería haber diversos niveles de enfermería: los que se lo curran… con unas responsabilidades, puesto y sueldo. Y los que pasan de todo, con otras responsabilidades menores y básicas, puesto y sueldo a su valor como profesionales. Creo que no todos los profesionales somos iguales, no todos tenemos el mismo valor y le guste o no a quien lea esto, no es justo que se nos trate a todos con idéntico rasero. Por una puñetera vez en la vida, los que trabajan-estudian-investigan tendrían que tener algún beneficio por encima de los demás.

    Espero que un día alguien tenga los… las gónadas necesarias para llevar ala práctica estos cambios. Pero lo más probable es que yo no lo veré. ¡Serán tiempos marcianos!
    Magnífica entrada, Virginia.

    1. Estimada Lola, me alegra ver que andas con fuerza y energía, sólo hay que leer las entradas de tu blog para entender que es así: #DONARENVIDA Enhorabuena y ánimos.
      Gracias por pasarte y aportar. Comparto esa necesidad de no auto-imponernos límites como profesión y profesionales, aunque la administración se encarga de hacerlo por nosotros, excluyendo esta opción del doctorado de los baremos de bolsas, nombramientos de interinos o procesos de concurso/traslado como parte de un proceso formativo más y en culminación académica, en ocasiones con implicación muy directa con la asistencial, ante líneas de investigación abiertas en la unidad asistencial donde trabajan. También comparto cuando hablas de destacar el valor de los que “trabajan-estudian-investigan”, y debo recordar que son las propias gestores de cuidados (me encanta llamar así a los supervisores), los que tendrían mucho que argumentar al respecto en la Evaluación del Desempeño Profesional (EDP) que se aplica a los profesionales del SAS, como es mi comunidad autonómica. He llegado a escuchar eso que aportas, que todos somos iguales, e incluso premiar al “conflictivo/a” para evitar problemas. Has abierto aquí un tema interesante y como dices, sin que se vislumbren cambios de momento, una pena, aunque al menos entiendo que necesitamos planteárnoslo por la necesidad de evolución de la Enfermería. Un abrazo enorme.

    2. Hola Lola, yo pienso igual que tu, actualmente estoy haciendo la tesis doctoral y no se me ha tenido en cuenta para nada a la hora de movilizarme a otro servicio con otra especialidad sin conocimiento alguno de ello a pesar de que estaba trabajando en una de las líneas de investigación de la unidad clínica a la que pertenecía y además gratis de mi tiempo libre. Pienso que ni nuestros propios jefes saben lo que esto significa y el beneficio que entraña tener profesionales que trabajen en cuidados pero a su vez lo hagan con evidencia científica y a su vez investiguen para encontrarla . Para colmo cuando tienen que pagar productividad me meten en el mismo grupo que al resto sin contar para nada las comunicaciones y trabajos de investigación realizados y que benefician a la unidad clínica . Resulto desmotivacion y burnout.

      1. Hola Lourdes:
        Perdona que te asalte en la respuesta que le das a Lola, pero observo una cuestión que me preocupa, quizás yo he dado pie al hablar de la Evaluación del Desempeño Profesional (EDP), pero no he hablado de productividad, ya que entiendo que por superar un proceso formativo y hacer una Tesis Doctoral no significa que yo sea más productiva que el resto de mis compañeras/os y es precisamente por ello que considero que debemos de ser rigurosos ante este aspecto, y ni se debe de premiar con cambios de unidades según preferencias o pensar que ya por superar o iniciar estos procesos formativos se establezcan ciertos privilegios ante el resto de compañeros/as. Ahora eso sí, si mi institución o administración establece una herramienta como la que especifico de la EDP, se debe al menos intentar por parte de los gestores de hacer un uso adecuado de esta herramienta, que puede ser mejor o peor, pero que existe y que abarca 4 áreas, dónde una de ellas es la formación y el interés en aportar valor y desarrollo científico en tu unidad, pero después hay otras áreas como el cumplimiento de objetivos asistenciales, el trabajo en equipo y la resolución de conflictos ante el trato y cuidado con los pacientes, etc. y explicado así a grandes rasgos. Pero por ello, entiendo que si existe la herramienta, se debe usar adecuadamente. Yo este año le pedí a mi gestora de cuidados que me la hiciera cara a cara (se había dejado de hacer) para entender cómo valora mi desempeño y poder saber que aspectos desea que puedo mejorar o al menos debatir posibles mejoras profesionales individuales y de la unidad. Esto es positivo. O al menos, yo lo he valorado así. Gracias por pasarte y aportar. Un abrazo.

  2. Pues si el doctorado no aporta nada a la clinica… Ya me dirás!!!
    ¿Por que va a ser mas valorada la experiencia? Solo significa que has trabajado, no que lo hayas hecho bien.
    ¿y los cursos de formación? Si la mayoría son compra-puntos!
    Yo creo que todo el bagaje de una enfermera la convierte en mejor profesional y el doctorado da una visión muy completa a la practica diaria. Como mínimo demuestra que una persona ha hecho un esfuerzo enorme por aprender y por hacer crecer la profesión y darle valor.

    1. En lo de comprar puntos llevas toda la razón. Es triste que no se valore otros méritos, y que realmente se premie a quién se ha esforzado en ello. ¿La experiencia? Bueno es importante, pero hay gente que va a trabajar y cumple con su horario y punto. Otros intenta mejorar los servicios y todo ésto habría que valorarlo también de alguna forma. La cuestión, es que la mayoría de supervisores, jefes de área, gestores, etc., son cargos de libre designación y mientras los políticos de turnos anden sueltos, de nada vale tener el mejor curriculum o formación.
      Por lo demás, enhorabuena por el artículo Virginia.
      Un saludo.

  3. Hola gracias a Virgina por tan brillante reflexión y abrir este debate.
    Creo que el hacer el doctorado aportara sin lugar a dudas un plus de calidad a la práctica asistencial de las enfermeras que opten por el trabajo asistencial, además ha de mantener la puerta abierta para el acceso de las enfermeras que deseen optar a ser docentes en la universidad.
    También creo y esta es una opinión muy personal, que para poder ejercer la práctica docente en la universidad es de vital importancia haber pasado unos años de ejercicio asistencial, creó que también aportaría un plus de calidad..Al igual que el obtener un doctorado.

    La obtención del doctorado, como es voluntario, es una opción de debe estar ahí, y no debemos ser las enfermeras las que nos aumentemos los obstáculos, ya bastante nos pone las administraciones para las que trabajamos. Y también que en las bolsas de trabajo se puntué el tener el doctorado.

    Si hay enfermeras que no se plantean hacer el doctorado..Pues bien es una decisión personal..Pero seamos serios y no ninguneemos a las compañeras que si decidan hacer ese esfuerzo, que sin ninguna duda aportara un corpus de conocimiento para el trabajo de otras enfermeras y de generaciones venideras y también una mejora en la calidad de la atención y los cuidados que prestamos en nuestro trabajo asistencial/docente / investigador.

    Un saludo. Animo y “palante”

    1. Prado, comentas otro aspecto que también es esencial y se me ha pasado resaltar. Estoy de acuerdo contigo cuando dices que “para poder ejercer la práctica docente en la universidad es de vital importancia haber pasado unos años de ejercicio asistencial, creó que también aportaría un plus de calidad”. Sin embargo, a día de hoy, en los baremos de las universidades la trayectoria asistencial no se está valorando en su justa medida (en la línea de lo que comentas) primando criterios que, si bien son fundamentales y deben estar presentes en el CV de un docente competente, solo se ajustarían a una parte del perfil deseable en un profesor universitario.

    2. Hola Prado
      Me alegra que te hayas animado a participar aportando tu visión, aunque es justo reconocer, como habrás leído, que el debate se abrió en Twitter, por Enrique y sus tweets, y al que se unió Alicia y otros muchos compañeros/as. Yo he creído necesario e interesante darle continuidad en la web-blog, sobre todo porque hay cuestiones que ayudan a replantearnos el tema. Me gusta esa idea del “corpus de conocimiento” para la profesión, como diría Juan (@juherya), lo que más se acerca a nuestra esencia enfermera, y que comparto, sobre todo si hablamos de valoración, planificación e implementación de los cuidados para alcanzar resultados en salud.
      Gracias y un abrazo.

    3. Hola Prado
      Me alegra que te hayas animado a aportar y gracias, aunque es justo reconocer, como habrás leído, que el debate se abrió en Twitter, por Enrique y sus tweets, y al que se unió Alicia y otros muchos compañeros/as. Yo he creído necesario e interesante darle continuidad, sobre todo porque hay cuestiones que ayudan a replantearnos el tema. Me gusta esa idea del “corpus de conocimiento” para la profesión, como diría Juan (@juherya), lo que más se acerca a nuestra esencia enfermera, y que comparto, sobre todo si hablamos de valoración, planificación e implementación de los cuidados para alcanzar resultados en salud.
      Gracias y un abrazo.

  4. Virginia, me ha encantado.
    Soy enfermera asistencial y opino lo mismo sobre este tema, así que no puedo estar más de acuerdo con este post y con los comentarios de Lola y Sofía. “Enfermería es Cuidados y mucho más”.
    “Otorgar puntos por tener un doctorado en una bolsa de empleo clínico es la típica chapuza ibérica…”. En fin…parece que Enrique no se plantea que las enfermeras asistenciales también investigamos. Investigar para qué? Que pérdida de tiempo, no?
    En mi opinión, tanto la investigación como la docencia universitaria pierden mucho cuando no se encuentran ligadas a la práctica asistencial. Veo que esta combinación (asistencia-docencia, asistencia-investigación) es esencial para el crecimiento de la profesión, para contribuir a su visibilidad.Por eso no puedo entender las incompatibilidades que continúan existiendo a día de hoy a la hora de combinar la docencia universitaria con el trabajo asistencial, por ejemplo. Sobre estos temas se podría escribir y debatir largo y tendido.
    Por otro lado está el tema del reconocimiento. No solo demandamos y defendemos el reconocimiento al mérito formativo sino también su adecuada y merecida valoración, al igual que se viene haciendo con otros profesionales sanitarios. En el caso del SAS, creo recordar que a los profesionales del grupo A se les otorga 4 puntos por tener el doctorado y 1 punto más si obtuvo la calificación de Cum Laude. Estamos hablando de 4 o 5 puntos, que no son moco de pavo.
    Qué está pasando? A ver si lo entiendo. Para algunas disciplinas, el hecho de que sus profesionales cuenten con el título de doctor sí aporta un valor añadido a su práctica asistencial (y por tanto se valora) y para otras disciplinas, como es el caso de la nuestra, no es así?? Por qué el sistema discrimina de esta forma a las enfermeras, fisioterapeutas, podólogos, terapeutas ocupacionales? Por qué no se nos valora este esfuerzo?
    Esto sí que es “la típica chapuza ibérica”. Esto y otras tantas que se vienen llevando a cabo cada día.

  5. Soy enfermera asistencial y estoy totalmente de acuerdo con este post y los comentarios, ya que “Enfermería es Cuidados y mucho más”.
    “Otorgar puntos por tener un doctorado en una bolsa de empleo clínico es la típica chapuza ibérica…”
    Parece que para Enrique las enfermeras asistenciales no investigamos. Para qué? Qué pérdida de tiempo, no?
    En mi opinión, tanto la docencia universitaria como la investigación pierden mucho si no están ligadas a la práctica asistencial, pues esta combinación (asistencia-docencia, asistencia-investigación) es esencial de cara a contribuir al crecimiento y visibilidad de la profesión. Por eso, no entiendo las incompatibilidades que a día de hoy siguen existiendo para combinar la docencia universitaria con el trabajo asistencial, por ejemplo. Sobre estos temas se podría escribir y debatir largo y tendido.
    Por otro lado está la cuestión del reconocimiento. No solo demandamos y defendemos el reconocimiento al mérito formativo sino también su adecuada y merecida valoración, al igual que se viene haciendo con otros profesionales sanitarios. En el baremo del SAS a los profesionales del grupo A, según recuerdo, se les está otorgando 4 puntos por tener el título de doctor y 1 punto adicional si obtuvo la calificación de Sobresaliente Cum Laude, lo cual no es moco de pavo. A ver si lo entiendo, para algunas disciplinas el hecho de que sus profesionales asistenciales cuenten con el título de doctor sí supone un valor añadido a su práctica asistencial y por tanto se les está valorando, y para otras disciplinas, como es el caso de la nuestra, no es así? Por qué no se nos valora este mérito? Por qué se está discriminado de esta forma a enfermeras, fisioterapeutas, podólogos y terapeutas ocupacionales?
    En mi opinión, estas sí que son “las típicas chapuzas ibéricas”. Estas y otras muchas que se vienen llevando a cabo día tras día.

    1. Hola Candela, qué alegría, gracias por pasarte.
      Me gusta esa idea de enriquecer/valorar en ambos sentidos: la investigación y la docencia universitaria ligadas a la práctica asistencial, como la práctica asistencial aderezada por procesos formativos desde la docencia y la investigación. Necesariamente esto nos conduce al reconocimiento profesional e institucional y la necesidad de su normalización en los baremos de selección para estos procesos formativos universitarios.
      Un abrazo enorme.

  6. Totalmente de acuerdo con todas las reflexiones.

    Parece que la enfermería tiene ese matiz de tirarse piedras sobre ella misma.

    Recuerdo una frase de un profesor estudiando la carrera “ni todos los doctores son médicos, ni todos los médicos son doctores”. Se creía que el doctorado estaba restringido a un tipo de profesión, y si ya la población parece que puede discernir estas diferencias, ¿por qué los propios profesionales no?. Con los médicos, parece que no existe esa duda de plantearse la utilidad o no del doctorado, es más, se asume que todos lo han realizado, independientemente de que se dedique a la docencia o la práctica asistencial.

    El que el doctorado sea( que no en todas las universidades todavía lo es) requisito para la docencia, ni mucho menos excluye que en la práctica asistencial tengan vetada su utilidad. Es más, ¿no se beneficiarán más nuestros pacientes que los profesionales que les atienden, realicen investigaciones de calidad para prestar los mejores cuidados? y a la hora de carrera profesional, baremación….el esfuerzo, tiempo y dedicación que supone, ¿¿¿no debe ser considerado???.

    Como apuntaban más arriba, el tener un doctorado debe puntuar !!siempre!!, y la pregunta de ¿pero para qué te sirve? ni siquiera se plantee, al igual que no se platea en otros colectivos, puesto que es evidente que sí o sí te mejora como profesional (incluyendo la práctica asistencial).

    1. Hola Tayra
      Gracias por pasarte. Entiendo que plantearnos y replantearnos estas situaciones permite acercarnos a diferentes escenarios de nuestra realidad enfermera y es verdad, y comparto que no es muy conveniente ponernos límites para lo que ya se encargan otros en la organización/administración sanitaria de marcarlos.
      Un abrazo.

  7. Hola,
    Me estoy preguntando qué emociones se esconden tras el tweet de Enrique (solo por comprenderlo mejor). Está claro que el doctorado por sí solo no tiene porqué convertirnos en mejores enfermeras, en mejores docentes, mejores investigadoras o, incluso, en mejores personas; sin embargo, aderezado con el suficiente talento, recursos, sentido ético y entusiasmo (crítico y bien humorado), ¿por qué no?…
    No, no creo que el doctorado tenga que convertirnos en enfermeras “too posh to wash”.
    ¡Gracias Virginia!
    Pedro.

    1. Hola Pedro
      Gracias a ti y gracias por pasarte.
      Si hay algo que Enrique sabe hacer, es su habilidad para que de un sólo tweet te replantees o cuestiones ciertos asuntos. A veces lo leo como un revolucionario en positivo (mi favorito “troll enfermero” dicho desde el cariño y admiración) de la cuestión y la duda ante diferentes asuntos profesionales y llevan al debate directo. Me recuerda a una persona amiga que estoy intentando que se anime a entrar en la red, pero no lo consigo. Seguro que enriquecería también mucho los debates.
      Comparto la idea de “aderezar con el suficiente talento, recursos” [económicos y humanos], “sentido ético y entusiasmo…”, seguro que a partir de estos valores mejoramos y evolucionamos como profesión.
      La otra idea de enfermeras “too posh to wash”, se complementa con “hands-on caring experience”, no?: la importancia de la formación académica y la experiencia del cuidado en la práctica asistencial.
      Un abrazo.

    2. Hola Pedro, el doctorado te da todas las herramientas necesarias para que generes conocimiento a través de la investigacion, este campo nos es lo suficientemente trabajado cuando estudias en la facultad , y te da la seguridad de que lo que haces lo haces correctamente o no , porque es un error decir que lo sabemos todo acerca de nuestro trabajo en el hospital ,centro de salud etc…. Diariamente van surgiendo dudas en nuestra práctica asistencial y no debemos conformarnos con lo que nos dice el médico o el compañero que tenemos al lado, debemos de buscar la respuesta nosotros y transmitirla al resto de compañeros, eso enriquece nuestra profesion y hace que avancé como disciplina.
      Un saludo

  8. Esta mañana me habéis encendido el café… con este post… y he querido siguiendo el esquema de Virginia aportar mi humilde opinión.

    1.) Doctor en Enfermería frente a ser enfermera clínica o asistencial
    Siempre me he posicionado en contra de “la enfermera para todo”; es más en ocasiones he manifestado mi posición a favor de la “especialización obligatoria”. Pienso que una enfermera no puede proporcionar cuidados profesionales en la infancia, en el anciano, en el adulto con problemas cardíacos, en cuidados intensivos… Ya que el campo del cuidado es tan amplio, que es necesario centralizar un área profesional donde poder centrar tu “capacitación para el cuidado”. Sin embargo, cuando hablamos de investigación o de gestión, se me enciende la preocupación de que algunas enfermeras no crean que esa área les compete y que son materias troncales como lo es la ética, la anatomía, la fisiología o la farmacología entre otras muchas. Por ello, llego a la conclusión de que el doctorado no es un área, sino “la acreditación a una trayectoria profesional”. Acreditación a la que voluntariamente toda enfermera está invitada, trabajes en cuidados en la infancia, cuidados críticos, cuidados de la mujer, en gestión de equipos, en salud pública o en un departamento de ética.

    2.) ¿El doctorado es beneficioso para la práctica clínica?
    Yo creo que todos estaremos de acuerdo que la “generación de conocimiento”, repercute en la práctica clínica. El producto del doctorado es conocimiento que proporciona a su disciplina y en consecuencia a todos sus colegas. ¿Qué la persona doctorada obtiene beneficio para la práctica clínica? Pues si basamos la práctica clínica en “procedimientos” podríamos tener dudas. Si basamos la práctica clínica en la totalidad del cuidado, desde luego que obtendríamos beneficios. Si además, la línea de investigación de esa persona doctorada se acerca a tu campo de trabajo pues todavía más. Y aquí, algunos podríamos decir que todos leemos mucho todas las semanas sobre materia de nuestra área de trabajo (y no viene de doctorados) y otros también podríamos quejarnos de que hay mucha mierda escrita por ahí, y que el producto de un doctorado está sometido a unos criterios de valoración y rigor académico al que no se somete todo lo que es escribe y se publica.

    3.) ¿Debe el doctorado puntuar en la bolsa de empleo única de tu comunidad o ámbito asistencial?
    No sé cómo funcionarán otras comunidades. Yo hablaré de la mía (País Vasco). Y voy a explicar algunas cosas que parece que alguno@s todavía no se han enterado o no se quieren enterar. En la mía hay una fase de concurso y otra de oposición. Bien cuando hacemos el examen nos sometemos todos a una prueba justa y equitativa. Después llega la fase de presentación de méritos. Y aquí es cuando me sorprende que haya personas que se planteen el debate de si un doctorado es un mérito y no planteen el debate de si la “formación a distancia privada” es un mérito o no, cuando en mi comunidad se está baremando. Aquí dejo a la reflexión de cada un@.

    4.) La universidad, la clínica y los doctores.
    Hoy día ser profesor de universidad no es tarea fácil y exige de un esfuerzo y sacrificio personal. Esfuerzo, que lleva a la obtención del doctorado, que como yo he dicho antes es la acreditación voluntaria a la que puede someterse “cualquier enfermer@” que tenga algo que aportar hoy en día. Sin embargo, quiero lanzar y dejar una pregunta en el aire. En la formación enfermera ¿son todas las materias teóricas? ¿no hay asignaturas/competencias clínicas? No entiendo esa postura de algún@s de alejar los doctores de la clínica y luego responsabilizarles de asignaturas clínicas.

    Es un gusto poder contar con personas que nos llevéis a estas reflexiones, gracias a todos los comentarios y a Virginia por el post.

    1. Hola y gracias por animarte finalmente a participar. Me alegro que el cafecito se animara.
      Con la idea que aportas de “la capacitación para el cuidado” y las competencias, se deba a que se ve quizás como más comprensible pensar que todas las enfermeras son competentes para ello “como de fábrica” (salimos “capacitadas” de la universidad), y se dejan de entender otras competencias necesarias como gestión e investigación. Incluso añadiría que son también una parte más del cuidado: gestionamos cuidados planificados y precisamos de consultar investigaciones hechas por otros para avanzar en este cuidado.
      Realmente como aportas es un esfuerzo, por supuesto y la docencia, exige curriculum, y si finalmente nos forman doctores que han desarrollado sus tesis en la asistencia, es evidente que pueda exigirse competencia en asignaturas clínicas.
      Gracias por pasarte y aportar.

  9. Muy interesante Virginia, el tema que planteas, sobre todo de cara al próximo curso, para aquellos/as que ya están o quieren iniciarse o matricularse en un doctorado.
    Estoy de acuerdo en la mayoría de cosas que comentas, a las que también añadiría alguna reflexión respecto del significado que tienen los doctorados para las disciplinas que los contemplan.
    Parece lógico que hacer una investigación de la que extraer unos resultados o datos originales, tiene un valor, de hecho la mayoría de papers o revistas científicas están llenos de investigaciones que no han sido resultado de una tesis o doctorado (aunque algunas sí) y las utilizamos.
    Para la disciplina de la persona que realiza la tesis hacer investigación y formar personas en métodos de investigación para poder liderar algunas o integrarse en equipos de investigación es un valor añadido, y es lo que al fin y al cabo identifica y hace avanzar a una disciplina o área de conocimiento.
    Mi experiencia: Diplomado en Enfermería, Máster oficial en Enfermería (con variadas líneas de investigación) y acceso directo al Doctorado a través de la misma línea que llevé en el máster (doctorando).
    Forma de realizar una tesis: Publicar el trabajo de investigación original o realizar un compendio de publicaciones extraídas o a partir de la investigación que se utilice durante el doctorado. Dependiendo del lugar donde la quieras realizar te pueden proponer una u otra.
    El debate surgía sobre si a una enfermera asistencial le aportaría algo tener un doctorado. Claro que sí, seguro que sí.
    Aunque si bien, los tutores de tesis (no suelen ser enfermeros asistenciales, si no docentes algunas veces de otras disciplinas). Hacer un doctorado como he dicho aporta valor a la disciplina, aunque no existen estudios que indiquen si la formación postgrado de una enfermera repercute positiva en la práctica asistencial (aunque esta última afirmación la pongo en duda porque recuerdo algo de José Miguel Morales Asencio que creo tiene algo sobre el tema).
    Aun teniendo el doctorado el Servicio de Salud, lo único que hace es puntuarlo en la bolsa de trabajo (de momento en el SESCAM no), ni tampoco para el tema de comisiones, cargos intermedios, etc… no se establece un baremo concreto que contemple esta cuestión. Hasta ahora el SESCAM no lo contemplaba, pero como digo a partir de octubre de 2014 lo contemplará sin ir más allá de tenerlo como mérito.
    http://sescam.castillalamancha.es/sites/sescam.castillalamancha.es/files/documentos/paginas/archivos/nuevo_pacto_seleccion_personal_temporal_de_ii.ss_.del_sescam.pdf
    Cuando te dicen que si quieres hacer la tesis has de hacerla por compendio de publicaciones y no de otra manera, queda claro para lo que te quieren… investigar para… y publicar para… (da igual de lo que sea), pero investiga y publica, sobre todo publica (“algunos” están ávidos de salir en las publicaciones y obtener méritos para los sexenios); aunque con la excusa de que uno tiene que publicar lo que investiga (que es cierto), parece más un sistema clientelar que un sistema en el que te puedas mover con libertad. Algunos directores de tesis dicen que si no es para entrar en la universidad no sirve de nada hacer un doctorado… puesto que si no vas a seguir la línea de investigación en la que te inicies es mejor no seguir.
    Sin embargo otros directores de tesis dicen que hay que investigar e intentar publicar, trabajes donde trabajes, te dediques a lo que te dediques o con el futuro puesto en la universidad o no.
    En la actualidad conozco algunos profesores que no tienen el doctorado, pero que son titulares, dan sus clases, realizan alguna ponencia y publican de vez en cuando. Llevan muchos años sin trabajar en la asistencia y entre sus objetivos no está hacer el doctorado.
    Si bien, para hacernos una idea de para qué sirven los doctorados tendríamos que remontarnos a los fines de la Universidad:
    a) La creación, desarrollo y crítica de la ciencia, de la técnica y de la cultura a través del estudio y la investigación.
    b) La transmisión crítica del conocimiento científico, técnico y cultural por medio de
    la educación de nivel superior, mediante una actividad docente y formativa de calidad.
    c) La preparación para el ejercicio de actividades profesionales que exijan la aplicación
    de conocimientos y métodos científicos, y para la creación artística.
    d) La difusión del saber universitario en la sociedad, así como la recepción de las
    manifestaciones culturales producidas en su entorno.
    e) El apoyo científico y técnico al desarrollo cultural, social y económico, con atención
    singular a las demandas particulares de la Comunidad Autónoma

    Un gran problema es que si te vas de profesor a la universidad, no puedes compatibilizarlo con la labor asistencial o al revés también (salvo que seas asociado y cobres 300€).

    Concluyendo (que me disperso), el doctorado es un valor añadido a nivel profesional, que dependiendo de para qué, dónde y de qué lo realices tiene un valor o no, una pena que algunas empresas o sistemas sanitarios no lo valoren más (sólo a nivel de carrera profesional sí que tiene valor, eso si no está congelada como en C-LM).

    Estoy convencido de que los Servicios Sanitarios en un futuro tenderán a valorar tener un doctorado, más que a nivel asistencial como reconocimiento o en convocatorias competitivas.

    Un saludo veraniego. @joserodrigocp

    1. Gracias Jose Rodrigo por acercarte a comentar. Observo matices interesantes, aunque mezclas muchas cuestiones, sobre unos de los escenarios relacionados con el doctorado, la universidad, así como de la posible perspectiva del profesorado en el doctorado y/o tutores de Tesis. Pero me voy a quedar con una reflexión: “El significado que tienen los doctorados para las disciplinas que los contemplan…”
      Quizás sería interesante plantear más de una investigación relacionada con estas cuestiones!! 😉
      Un abrazo.

  10. Gracias Virginia por abordar en profundidad este tema (se lo merece) y gracias también a todos por compartir vuestras reflexiones, especialmente a Lola Montalvo, por la contundencia y claridad de argumentos, que comparto en su totalidad.

    Claro que debe ser valorado el esfuerzo en formación (cualquiera que sea), pues ello constituye el bagaje como persona y profesional de cada uno. ¿Mejores profesionales?, claro no tiene porque ir en relación directa, pero seguro que tampoco peores y al menos aquí sí que “atesoran” el ánimo y las ganas de mejorar, de avanzar y se comprometen con ello (con el esfuerzo que supone)… Creo que lo que de verdad debería preocuparnos es que much@s compañer@s sólo aspiren a “cubrir” su turno (y si encima me dan las órdenes por escrito, mejor; no vaya a tener que aplicar mis conocimientos para tomar decisiones).

    Ánimo, sigamos formándonos y demostrando nuestra capacidad. Salu2 a to2

    1. Hola Luis
      Me alegra que te pases y te animes a comentar.
      Quizás no mejores, pero al menos no peores profesionales, ¿no? Y has tocado una palabra mágica en la asistencia, compromiso, y como yo lo entiendo es para con el cuidado del paciente. Y desde este compromiso, buscar la manera de “avanzar y mejorar” como indicas.
      Gracias por pasarte y un abrazo.

    2. Hola Luis
      Mucha gracias por animarte a comentar. Está interesante esa valoración que haces desde “no mejores, pero al menos no peores”, y sobre todo me parece especialmente importante para la practica asistencial la palabra que utilizas, “el compromiso” profesional con nuestros pacientes por mejorar, formarnos y aspirar a avanzar hacia la excelencia en el cuidado. Ello implica a otros muchos aspectos necesarios (apoyo, recursos…) pero desde la base del compromiso se puede al menos aspirar a alcanzar avances profesionales.
      Un abrazo.

  11. Gracias a Virginia y a todas las que habéis aportado vuestra opinión en un debate supervalioso para la profesión enfermera.

    Responderé sólo a la primera pregunta: ¿el doctorado es BENEFICIOSO para la práctica clínica? Voy a añadir otra pregunta que da respuesta a esa primera:¿Las enfermeras no nos cuestionamos qué forma de cuidado es el mejor en nuestro trabajo asistencial? Claro que si, ¡cada día!. Entonces, ¡es necesaria la investigación! Las enfermeras debemos investigar y dar respuesta con rigurosidad a las preguntas asistenciales.
    Cuestiona Candela Bonfill algo que me atrevo a afirmar: “la investigación debe estar ligada a la práctica asistencial”. Y como nos señala Andervz: la “generación de conocimiento” repercute en la práctica clínica.

    Gracias Prado Sánchez por estas palabras: “seamos serios y no ninguneemos a las compañeras que si decidan a hacer ese esfuerzo, que sin ninguna duda aportara un corpus de conocimiento para el trabajo de otras enfermeras y de generaciones venideras y también una mejora en la calidad de la atención y los cuidados que PRESTAMOS en nuestro trabajo asistencial/docente / investigador”. Opino como tu que el doctorado es conocimiento que se proporciona a la disciplina enfermera. Por eso: ¡Adelante con nuestras tesis doctorales! Sabemos que requieren un esfuerzo extra pero… ¡seguro que valdrá la pena!

    Creo firmemente que la persona doctorada obtiene beneficio de su trabajo investigador para la práctica clínica. En la práctica asistencial se genera la necesidad de buscar respuestas que mejoren y hagan más eficiente la asistencia sanitaria que prestamos a los pacientes.

    Y añadiría que la práctica clínica asistencial está basada en el cuidado enfermero y solo las enfermeras debemos y podemos aportar nuestra mirada, diferente a la de otros profesionales, con nuestras investigaciones. La evidencia científica y la investigación rigurosa aportan beneficios al cuidado enfermero. Y, como Lola Montalvo, pienso que un doctorado siempre debería baremar.

    Un placer compartir este post con todas vosotras enfermeras!

    1. Hola Fabiola y gracias por estar y aportar:
      En general la investigación es hacernos preguntas en busca de sus respuestas, y eso se puede hacer sin tener que abrir un periodo académico de doctorado y tesis doctoral, lo que ocurre es que si se decide iniciar y concluir, entiendo que debe ser valorado por la administración y que se bareme en igualdad al baremo establecido para otras disciplinas, como un proceso formativo más y ahí estoy de acuerdo contigo. Evidentemente este proceso formativo aportará más competencia en investigación y rigor científico para aplicar evidencias científicas a nuestra práctica asistencial, pero quería también matizar que porque se abra este proceso formativo no significa más competencia clínica para trabajar con evidencia o que los que no lo hagan o no quieran hacerlo, trabajen en ausencia de ellas.
      Un abrazo.

  12. Gracias Virginia por trasladar este debate tuitero a la red bloguera.
    Gracias a todos por los comentarios tan enriquecedores y sinceros.

    La “tipica chapuza ibérica” es el enfoque que se le ha dado a la disciplina enfermera desde siempre y todos los intereses que hay en ello.
    En el artículo que os enlazo se habla sobre el desarrollo de la especialidad de MQ, pero la reflexión es más intima y habla del desarrollo de las especialidades y el enfoque dado. Proponiendo el desarrollo de la carrera profesional de la siguiente manera:

    “El desarrollo de la Enfermería de Práctica Avanzada está vinculado a un desarrollo competencial específico que incluye áreas de docencia, gestión, investigación y clínica avanzada, con una mayor autonomía de la enfermera basada en su capacidad de decisión y juicio clínico, valoración integral y abordaje terapéutico”

    Padilla Marín, C.; Camacho Bejarano, R.;Domínguez Guerrero, F.; Terol Fernández, E.; Padín López, S.; Reflexiones sobre el borrador del programa formativo de la especialidad de enfermería en cuidados médico-quirúrgicos [Editorial] – Enfermería Clínica 2013 ; 23(1) : 1-3 http://zl.elsevier.es/es/revista/enfermeria-clinica-35/reflexiones-borrador-programa-formativo-especialidad-enfermeria-cuidados-90192425-editorial-2013

    Por lo tanto un Doctorado en enfermería debería traducirse en la posibilidad de desarrollo competencial de la enfermera doctora, dándole oportunidades de continuar aportando conociiento sobre aquello que ha estudiado en profundidad. Y la falta de oportunidades es lo que prima. Deberían ser los propios centros sanitarios los que fomentaran la adquisición de nuevas competencias a los profesionales que se vieran con fuerza para su desarrollo profesional. En cambio gira todo en torno a sistema de méritos.

    Por una parte “los puntos”. “¿Alguna vez alguien se ja planteado que piensa sobre los puntos de la bolsa una profesional del sector privado, al que por mucho que se desarrolle nadie le va reconocer? Pues a pesar de esto muchos por interés profesional avanza en su desarrollo incluso llegando a Doctorarse.

    Acreditación. Muchos centros sanitarios necesitan pasar su acreditación, y si fomentan la realización de estudios científicos o la formación de los profesionales es por pasar sus propios méritos. Y no por querer desarrollarse o posicionarse en el sector. (Esto es algo que pasa en el sector concertado)

    La Universidad, Como dice @joserodrigocp, la universidad tampoco fomenta Profesores Doctores que mantenga su linea de investigación y que continúen vinculados a la practica asistencial, fomentando y contratando profesionales con contratos de “exclusividad”, impidiendo mantener la practica asistencial, y adjudicándose al “Doctor”.

    Por lo tanto veo todo el sistema corrupto. Además l@s propi@s enfermer@s critican a aquell@s que ven a su alrededor que comienza a estudiar y dearrollarse, en vez de mirarlos con orgullo profesional y buenos ojos. (A mi llegaron a decir – “Qué pesao estás con la enfermería (mientras estudiaba el máster)) Así que vaya tela.

    Y como colofón está el Gobierno y los planteamientos confusos de las leyes de educación, algo que reflejo en el post http://www.nuestraenfermeria.es/invocando-la-vocacion-enfermera/ con el tema de las carreras de 4 años que pasan a tres y los masters de 120 Creditos que vendrán para quitar los de 60. ( lease la noticia Wert dice que las carreras de tres años pueden implantarse en 2015 y los rectores piden más tiempo).

    Virginia Felicidades de nuevo. Gracias por tus planteamientos que solo puedo apoyar, y defender el desarrollo independiente de la enfermería en todos los ámbitos y con la capacidad propia de cada individuo.

    Un saludo

    1. Hola Fernando, que bien, gracias por pasarte y aportar bibliografía al tema.
      Quizás no sea la última vez que traslade un debate tuitero a la blogosfera sanitaria, pero al menos si sé que lo haré de otra forma, sobre todo al entender que las opiniones públicas no son tan públicas.
      Como bien aportas, el debate va más allá de si puntúa o no puntúa en una bolsa o baremo concreto, que también, sino en entender lo que los propios profesionales valoramos y apreciamos espacios de mejora competencial en metodologías de investigación y pensamiento crítico. Y esto es fundamentalmente positivo en nuestro desarrollo profesional. O al menos esa es mi opinión y así os lo he hecho mostrar.
      Gracias y un abrazo.

  13. Viendo este debate con un poco de perspectiva, de unos cuantos años, supone un enorme avance. Haata hace no tantos años, ni siquiera se planteaba la opcion de acceder a estudios de doctorados para las enfermeras, y ahora estamos hablando sobre su utilidad, su repercusion y su valoración en la practica asistencial. Esto implica que ya se asume que es posible acceder a los estudios de doctorado para cualquier enfermera asistencial¡¡¡ El avance el enorme.

    Y digo posible, que no fácil, carente de esfuerzo personal, o accesible de forma rápida; pero si al alcance que quien realmente se lo proponga. Salvo un cambio de tipo cataclismo en la estructura de la formacion universitaria española (que con nuestros politicos nunca se pueda descartar) este movimiento es imparable y va a continuar. En el ámbito académico, de la universidad, que ahora conozco más, sus efectos ya son palpables, con un incrmento espectacular en la proporción de docentes doctores en el área de Enfermeria (igualando o incluso superando ratios de otras areas de conocimiento); en el ambito asistencial, aun falta, pero creo que los efectos del aumento de enfermeras/os con formacion de doctorado, trabajando en asistencia y en gestion, se va empezar a notar pronto, en cuanto se alcance algo más de masa crítica.

    Hasta hace pocos años, las palabras Doctorado y Enfermería, juntas en una misma frase, provocaban desconcierto, recelos e incluso menosprecio en muchos ámbitos academicos e institucionales. Aun recuerdo una pregunta (hecha con buena fe) de unos compañeros universitarios de un area de conocimiento de ciencias, sobre para qué podia ser necesario el doctorado para las enfermeras, puesto que su trabajo consistia en tomar la tensión arterial y poner inyecciones??? Esto tiene mucho que ver con la imagen social que se transmite, y creo que el acceso de cada vez enfermeras al doctorado lo irá cambiando.

    Desde mi opinión, el doctorado debe ser valorado en cualquier baremo de méritos profesionales, igual que toda la formación, igual que formacion de postgrado; incluso deberia ser considerado como un requisito para el acceso a puestos de gestion y puestos directivos (lo que ya ha sucedido en otros sistemas sanitarios del ambito anglosajon). El doctorado aporta habilidades clinicas, no manuales, sino de capacidad de analisis de situaciones, obtener informacion en ambientes de incertidumbre, toma de decisiones, comunicación, liderazgo… A este respeto es interesante el concepto de Doctorado Profesional (Professionbal doctorate) que se llevan desarrollando en muchas universidades en Reino Unido, Australia, en distintas disciplinas con un alto componente profesional, como ingenierias, salud, etc.
    (http://www.societyandhealth.co.uk/courses/professional-doctorate-in-nursing)

    Concretando, el acceso de enfermeras (todas, asistenciales, docentes-investigadoras, gestoras) al doctorado es un importante avance, que ha costado mucho esfuerzo colectivo conseguir, y que debemos hacer lo posible por mantener. El debate que ha abierto Enrique y otros tuiteros, y que Virginia recoge aqui, es importante, aunque no debemos cometer el error que es lo que preocupa a la mayoria de los profesionales. Tampoco a los pacientes o usuarios, hasta que no se empiece a demostrar que la incorporacion de más enfermeras doctoras a los servicios sanitarios, mejora los resultados de salud. Hacerlo está en nuestras manos.

    Saludos veraniegos

    1. Hola Pedro L Pancorbo:
      Me alegra que te hayas animado finalmente a comentar. Me gusta ese análisis en restrospectiva sobre la oportunidad para Enfermería desde hace unos años, ante la posibilidad de acceder a estudios de posgrado, y entre ellos el Doctorado, aunque como bien comentas era un verdadero obstáculo profesional y hasta una “sin razón” para determinados profesionales, clínicos asistenciales y académicos. Gracias por el enlace que aportas sobre Doctorado Profesional en Enfermería del RU, recuerdo que en el dabate twittero, Enrique comentó la existencia de este concepto y me parece muy interesante desde esa idea de potenciar el desarrollo profesional en la organización para la profesión. Realmente, aspirar a alcanzar ciertas habilidades y capacidades clínicas como comentas a través de una formación posgrado creo que debe ser entendido como un estímulo para alcanzar los mejores resultados en salud y una necesidad de evolución y progreso para la profesión. Quizás y cómo bien aportas terminaran siendo necesario procesos formativos de posgrado para aspirar a puestos directivos o de gestión. Es más, me atrevo a pensar lo interesante de una formación posgrado como el Doctorado de Gestión del Cuidado en Enfermería. Estas situaciones ayudarían a profesionalizar la gestión en sanidad, que entre otras cosas tiene que necesariamente pasar por el conocimiento. Gracias por pasarte.
      Un abrazo.

  14. Buenas tardes, para mí ha sido una sorpresa este debate, pensaba que desde Bolonia estaba superado. Estoy de acuerdo con todas aquellas personas que defienden la incorporación de enfermeras doctoras a los servicios de salud, creo que ya es hora de romper la disyuntiva funcional (asistencial, docente, gestora e investigadora). A mí lo que me preocupa en este momento es la propuesta del ministerio de un nuevo plan de estudios a tres años…

    1. Hola Ana Mª, gracias por pasarte y aportar tu opinión y tus temores. Y entiendo que sorprenda el debate, aunque no es “si o no” al doctorado en Enfermería, quiero pensar que la existencia de esta opción como formación posgrado es algo que ya no nos lo cuestionamos, sino más bien su utilidad en la práctica clínica y su valoración en los baremos selectivos. Incluso creo que lo siguiente sería preguntarnos cuántos, cómo y sobre qué, ¿no crees?
      Respecto a tu temor quizás en este enlace http://www.consejogeneralenfermeria.org/index.php/sala-de-prensa/noticias/item/6590-el-futuro-grado-universitario-de-tres-a%C3%B1os-no-afectar%C3%A1-a-enfermer%C3%ADa#.U_JkUbx_suc que indica que el futuro grado universitario de tres años no afectará a Enfermería. Espero que el informe de aquel grupo de expertos donde valoraban a la carrera de Enfermería como una “materia” que debía volver a la diplomatura no prospere y evitaremos vernos obligados a buscar estrategias alternativas costosas para completar estudios de posgrados como el doctorado.
      Un abrazo.

  15. Bueno, poco puedo añadir a lo expuesto, pienso que el debate confunde por momentos utilidad con puntuación o méritos…
    Es bueno hacer el doctorado? Sin duda alguna, ahora eso no significa que sea útil para mi unidad, servicio o pacientes… Al menos a priori.
    Si tu puesto de trabajo está en una unidad clínica hospitalaria y tu doctorado versa sobre la historia de la enfermería comunitaria en el ámbito rural… Aportas al conocimiento enfermero, pero es poco útil para ti.
    En cuanto al méritos y puntuaciones no digo nada porque ni en oposiciones y menos en bolsa se puntúan méritos que realmente valoren lo que un profesional puede aportar al sistema en general o a un puesto concreto de trabajo…
    Por que iba a ser distinto el doctorado?
    Lo que más me preocupa es la creciente brecha entre la enfermería docente y la asistencial…

    1. Hola Esteban
      Gracias por pasarte y aportar tu opinión. Me parecen muy oportunas tus apreciaciones. Respecto a la utilidad, en definitiva yo entiendo que debe ser para los ciudadanos que cuidas en esa unidad asistencial donde se trabaje (ya que hablamos de valor clinico o asistencial), fundamentalmente pensando en la utilidad más principal de la investigación en salud: el bien del paciente, su seguridad y bienestar. Y en cuanto a la brecha que comentas me preocupa también que se separen aspectos que deberían ser inseparables. Un abrazo.

  16. La pregunta sobre si el Doctorado en Enfermería es útil o no para la Enfermería asistencial queda ya bastante contestada y bien argumentada.

    Desde que terminé la carrera, siempre pensé que el Doctorado era la cúspide, el último paso que cualquier enfermero debía de dar para poder ofrecer los mejores cuidados basados en la evidencia. Hoy en día, al estar realizando dicho doctorado, advierto de mi error, y es que ser doctor es justamente el principio para mejorar la propia profesión y el punto de partida para añadir un cuerpo teórico-práctico de conocimientos a los cuidados que realizamos diariamente.

    ¿Debe ser baremado en las bolsas? Por supuesto, y añadiría que en mi bolsa (para bien o para mal, la del Servicio Andaluz de Salud), debería estar baremado en el apartado de investigación, ya que al final se te valora la realización de la investigación que se ha hecho, dándose por sentado que se ha estudiado una base teórica para poder realizarla.

    ¿Una tesis doctoral debe realizarse en el mismo campo que se realiza la actividad asistencial? No necesariamente, aunque sí es cierto que es una ventaja aplicar la investigación en la mejora de nuestro trabajo asistencial.
    Desgraciadamente, hay un grupo de enfermeros (entre las que creo que podría incluirme) que son jóvenes, menores de 30 años y que están realizando el doctorado. Como sabéis, este sector tiene el gran inconveniente de que, por lo general, sólo tiene contratos eventuales en navidades y en verano, sin contar con el hecho de que van trabajando turnos sueltos por todas las zonas de un/varios hospital/es, por lo que difícilmente su tema de investigación tenga que ver con las diversas zonas en las que trabaja. La única ventaja que tienen es el tiempo que disponen para realizarlo, ya que suelen tener 9 meses de desempleo, si tienen la paciencia suficiente como para no ser tentados a trabajar en el extranjero.

    Eso sí, la parte más interesante del doctorado es que aporta una nueva visión en los enfermeros en los que se cuestiona todo y se plantean nuevas vías de procedimiento que antes no se nos pasaría por nuestra mente, y creo que todo aquel que esté pasando o haya pasado este periodo lo sabe o tiene una ligera idea de ello.

    Es una pena que la propia Enfermería sea la primera enemiga de la propia Enfermería. Es un aspecto que nada ha variado desde hace más de 150 años, cuando los Ministrantes se quejaban amargamente de que los propios Ministrantes no valorasen más su propia profesión.

    Un saludo y espero que esta humilde opinión haya sido de utilidad.

  17. La pregunta sobre si el Doctorado en Enfermería es útil o no para la Enfermería asistencial queda ya bastante contestada y bien argumentada.

    Desde que terminé la carrera, siempre pensé que el Doctorado era la cúspide, el último paso que cualquier enfermero debía de dar para poder ofrecer los mejores cuidados basados en la evidencia. Hoy en día, al estar realizando dicho doctorado, advierto de mi error, y es que ser doctor es justamente el principio para mejorar la propia profesión y el punto de partida para añadir un cuerpo teórico-práctico de conocimientos a los cuidados que realizamos diariamente.

    ¿Debe ser baremado en las bolsas? Por supuesto, y añadiría que en mi bolsa (desgraciadamente, la del Servicio Andaluz de Salud), debería estar baremado en el apartado de investigación, ya que al final se te valora la realización de la investigación que se ha hecho, dándose por sentado que se ha estudiado una base teórica para poder realizarla.

    ¿Una tesis doctoral debe realizarse en el mismo campo que se realiza la actividad asistencial? No necesariamente, aunque sí es cierto que es una ventaja aplicar la investigación en la mejora de nuestro trabajo asistencial.
    Desgraciadamente, hay un grupo de enfermeros (entre las que creo que podría incluirme) que son jóvenes, menores de 30 años y que están realizando el doctorado. Como sabéis, este sector tiene el gran inconveniente de que, por lo general, sólo tiene contratos eventuales en navidades y en verano, sin contar con el hecho de que van trabajando turnos sueltos por todas las zonas de un/varios hospital/es, por lo que difícilmente su tema de investigación tenga que ver con las diversas zonas en las que trabaja. La única ventaja que tienen es el tiempo que disponen para realizarlo, ya que suelen tener 9 meses de desempleo, si tienen la paciencia suficiente como para no ser tentados a trabajar en el extranjero.

    Eso sí, la parte más interesante del doctorado es que aporta una nueva visión en los enfermeros en los que se cuestiona todo y se plantean nuevas vías de procedimiento que antes no se nos pasaría por nuestra mente, y creo que todo aquel que esté pasando o haya pasado este periodo lo sabe o tiene una ligera idea de ello.

    Es una pena que la propia Enfermería sea enemiga de la propia Enfermería. Es un aspecto que nada ha variado desde hace más de 150 años, cuando los Ministrantes se quejaban amargamente que los propios Ministrantes no valorasen más su propia profesión.

    Un saludo y espero que esta humilde opinión haya sido de utilidad.

    1. Hola Enfuroboros, te agradezco tu comentario y te deseo mucha suerte en tu blog: “Uróboros enfermero”. Pasé para leerte. Enhorabuena.
      Me alegra saber que de lo que pudo ser el doctorado a lo que es, hay una evolución en positivo una vez que estás en el proceso de formación, eso es estimulante para quien se proponga iniciarlo. Es curioso, nunca lo entendí como un punto de partida (quizás la diferencia de edad al iniciarlo), aunque si entiendo lo que comentas desde la posibilidad de contribuir a complementar cierta capacidad de análisis (como dice Pedro L.) y sentido crítico en el ejercicio del cuidado profesional. Y evidentemente en tu bolsa de empleo del SAS, que también es la mía, y hasta lo que yo sé, no puntúa el doctorado, ni la defensa de tesis, ni el título de doctor, así que también en esta comunidad hay diferencias en la valoración de baremos entre disciplinas que pueden acceder a estudios de posgrado.
      Pero sin embargo hay profesionales sanitarios como tu caso, que entre contrato y contrato, deciden ampliar la formación. Recuerdo que en las conversaciones twitteras se dijo que al cabo de unos años habrían enfermeras/os con dos doctorados o más (aunque espero y deseo que ya trabajando a tiempo completo y a ser posible con estabilidad laboral), y ante esta visión me pregunto ¿es negativo esta situación para la profesión?.
      Evidentemente me hablaréis de efectividad y validez, aunque leyendo un reciente artículo, “Pericas-Beltran J, Gonzalez-Torrente S, De Pedro-Gomez J, Morales-Asencio JM, Bennasar-Veny, M. Perception of Spanish primary healthcare nurses about evidence-based clinical practice: a qualitative study. International Nursing Review. 61 (1): 1466-7657”, donde referencian a Profetto-McGrath et al. (2007) sobre las fuentes de información que enfermeras de nivel de doctorado o máster, utilizan en su práctica clínica diaria, y concluyen que se basan o fundamentan principalmente en las investigaciones de otros profesionales de la salud, su experiencia personal o la educación y la literatura seleccionada. Es decir, ya nos están diciendo que orientan o hay una cierta tendencia de orientar el trabajo diario hacia el desarrollo de la práctica clínica basada en la evidencia. Y esto es beneficioso.
      Pero no todo es positivo, y en el artículo referido de Pericas-Beltrán et al. que exploran con metodología cualitativa las percepciones de las enfermeras de atención primaria ante la PCE destaco esta frase traducida de sus conclusiones: “…los participantes sintieron que necesitan el apoyo científico que les conceda la fortaleza-apoyo (también económica – añado yo) y el reconocimiento social de su profesión…” Y esta cuestión es fundamental. Gracias por pasarte. Un placer leeros a todos.
      Un abrazo.

  18. Participo en el debate y amplío lo comentado a través de Twitter el otro día. Decir que comparto y coincido con muchos de los comentarios ya publicados anteriormente.

    El otro día empecé diciendo que los propios profesionales levantan barreras al cuestionar a enfermeros doctores o doctorandos. Hay quien los ve como una especie de bichos raros. Incluso se pueden tener dificultades para encontrar compañeras dispuestas a colaborar en la recogida de datos si la base de tu investigación es un estudio analítico longitudinal. Y eso que el beneficio es para todos, uno se lleva la tesis, los colaboradores su nombre en publicaciones y el paciente una puerta abierta para mejorar sus cuidados. Pero claro, una cosa es proponer que alguien se comprometa a estar un año recogiendo datos y otra muy distinta que participe para hacer un póster para un congreso en dos tardes. A esto último se apunta todo el mundo. También encuentras compañeras que parecen saber mucho más que tú de tu tan trillado, documentado y referenciado tema de tu tesis sin necesidad de hacer búsquedas bibliográficas… (el pubmed y cochrane les suena a chino…)

    Comparto la opinión expresada por Enfuroboros de la dificultad que puede encontrar el doctorando que trabaja como eventual más o menos todo el año, pero rotando por todas las unidades, fuera de la Unidad donde debería estar desarrollando su investigación. Ahí es donde necesitas esos apoyos tan difíciles de encontrar.

    Hablamos del valor clínico que puede tener una enfermera asistencial doctorada. Como ya expresé, creo que el doctorado sí que puede tener valor clínico, sobretodo si tu línea de investigación está ligada a tu día a día asistencial. Si investigo sobre los cuidados que ofrezco cada día, puedo ayudar a mejorar esos cuidados. En ello radica la utilidad de la doctora asistencial, además, al realizar el doctorado se adquieren habilidades de búsqueda de información-evidencias para posteriormente poder aplicarlas. Una enfermera doctora no es mejor enfermera que otra que no es doctora, pero sí se le supone adquiridas una serie de capacidades que pueden mejorar la calidad de los cuidados que administre tanto ella como el resto del personal de la planta donde trabaje. Porque ¿de qué te sirve tu conocimiento si no lo difundes entre tus propios compañeras de planta?

    Sobre el asunto de si deben o no deben puntuar en bolsas de trabajo, decía que, si puntúan cursitos online que haces con el manual en la mano… ¿por qué no puntuar un doctorado? Es formación que exige durante años mayor dedicación y sacrificio que los cursitos. Debería puntuar, como también puntúa si tienes una especialidad. Es más, si para profesionales médicos puntúa, también lo debería hacer para el resto de profesionales.

    También salió otro debate: el de la “titulitis”. Yo creo que el profesional que se embarca en la aventura del doctorado, no lo hace por la “titulitis”. Hay otros motivos, quizás menos superficiales y más personales: superación, reto personal, tocar el techo académico, dejar la puerta abierta a la docencia universitaria, inicio de carrera en investigación… Pero no creo que se haga un doctorado por el mero hecho de tener el título. Para la titulitis ya están los innumerables cursos de “experto” y los “Másteres oficiales y no oficiales”. Ojo, que no digo que no sean útiles y necesarios, todo lo contrario. Hay cursos de expertos y másteres que sirven para trabajar en puestos enfermeros muy específicos.

    En definitiva, más que necesario o innecesario, yo diría que el doctorado en una enfermera asistencial es más que útil y conveniente y que debería verse reconocido en las bolsas de trabajo.

    Un saludo.
    Enfermero Mileurista.

    1. hector González de la Torre

      Hola a todos:
      Realmente el debate es muy interesante. Creo que es absurdo comentar la utilidad de realizar o no un doctorado, debería ser un debate superado. Yo creo que uno de los principales problemas de la enfermería española frente a otros modelos de enfermería es la nula adecuación de la formación recibida a la ubicación profesional de un determinado profesional. Realmente hay pocos puestos específicos en los sistemas de salud de cada comunidad a los que puedan optar un determinado profesional por tener una formación especifica en ese campo.
      No parece que las especialidades hayan solucionado el tema, sobre todo por la cobardía de las diferentes administraciones a la hora de fomentar un modelo que esta establecido por un BOE y también desde ciertos ámbitos de la enfermería, donde se está intentando torpedear este modelo.
      Un ejemplo claro es mi comunidad autónoma Canarias.Se prepara una OPE para el año que viene (esta bien después de 12 años) y en el pliego inicial se iba a puntuar la especialidad con 3 puntos, el master oficial con 2 puntos. Los sindicatos protestan (los de enfermería no otros) y se baja la puntuación de la especialidad a 1,5 puntos (que es una puntuación menor que si contaran los dos años de residencia como tiempo trabajado, es decir hacer la especialidad cuenta MENOS que trabajar esos dos años de enfermero) y se baja a uno la puntuación a un punto si tienes master oficial, y se sube la puntuación por formación continuada ( y todos sabemos cual es la calidad de muchos cursos de formación continuada).Básicamente se intenta potenciar que consigan la plaza la “vieja guardia”.
      Es imposible cambiar ciertos aspectos de la enfermería sin sacudir la estructuras organizativas.. Si no premio a los profesionales que se forman ( y hay muchas maneras de hacerlo) no puedo después pretender que los enfermeros asistenciales tengan un nivel formativo adecuado al puesto que ocupan ( hay trabajos publicados sobre el estress de los enfermeros en periodo estival cuando los llaman para sustituciones en servicios donde ni han trabajado ni se encuentran preparados). Y esto cuesta vidas (todos recordamos el caso de Madrid en al UCI pediatrica).
      Mientras desde la enfermeria hagamos la disticinción entre una enfermería teorica (EJ: los que hacemos el doctorado ,publicamos y somos los que guiamos a la profesión enfermera)….) y la asistencial (nosotros somos los que sacamos el trabajo, realmente somos los que estamos a pie de cama desde hace 30 años y los teóricos no tienen ni idea de hacer una cura, que me van a contar a mi) poco avance efectivo puede haber en la profesión. El desarrollo profesional de un enfermero en este país es un camino largo, difícil y con escasas posibilidades de éxito desde el punto de vista laboral.
      Un saludo

      Héctor González

      1. Hola Héctor
        Gracias por pasarte.
        Planteas aspectos novedosos al debate, y realmente parece algo simplista el asunto si pensamos que Enfermería se separa, por un lado en los “teóricos”, como los defines y por otro lado, los “asistenciales”, pero creo que has aportado un planteamiento interesante de razonar y muy necesario para la profesión ¿necesita Enfermería a esos “teóricos” que defines que investigan, publican y aportan corrientes de opinión? o ¿dejamos que sea sola la enfermería asistencial la que saque el trabajo a pie de cama? Yo personalmente creo que esta dualidad es poco optimista para mirar a un futuro profesional con aspiraciones a que no nos digan que hay que hacer, sino que seamos los propios profesionales los que podamos decidir cómo cuidar y cómo hacerlo de la mejor manera posible. Y para ello es necesario que la enfermería “teórica” y la enfermería asistencial trabajen a codo.
        Eso si lo tengo claro, yo opino que si no toda la profesión debe de investigar o tener másteres o doctorados, si al menos todos debemos saber trabajar en la intención de alcanzar los mejores resultados en salud. Y en esto las enfermeras “teóricas” ayudan a descubrir y las enfermeras asistenciales ayudan a resolver, cuando además la mayoría de las veces, se comparten espacios asistenciales para cuidar y aunque otras veces los “teóricos” se hallan apartado de la asistencial, entiendo que no por ello dejan de ser necesarios.
        Por otro lado abarcas un tema delicado “…la nula adecuación de la formación recibida a la ubicación profesional de un determinado profesional…”, y una cuestión que debe mejorar y evolucionar, necesariamente, claro que para ello es imprescindible el compromiso de los representantes que así lo deben de valorar, de los gestores y de los políticos, para definir esos espacios asistenciales especializados y adecuados a la formación del profesional. Y el ejemplo que cuentas de la baremación en la OPE, relata como de cerradas están las estructuras de vinculación con la profesión, cuando la formación continuada está muy argumentada (y negociada) desde los sindicatos.
        Un abrazo.

      2. Hola Héctor
        Gracias por pasarte.
        Realmente parece algo simplista el asunto si pensamos que Enfermería se separa, por un lado en los “teóricos”, como los defines y por otro lado, los “asistenciales”, pero creo que has aportado un planteamiento interesante de razonar y muy necesario para la profesión ¿necesita Enfermería a esos “teóricos” que defines que investigan, publican y aportan corrientes de opinión? o ¿dejamos que sea sola la enfermería asistencial la que saque el trabajo a pie de cama? Yo personalmente creo que esta dualidad es poco optimista para mirar a un futuro profesional con aspiraciones a que no nos digan que hay que hacer, sino que seamos los propios profesionales los que podamos decidir cómo cuidar y cómo hacerlo de la mejor manera posible. Y para ello es necesario que la enfermería “teórica” y la enfermería asistencial trabajen a codo.
        Eso si lo tengo claro, entiendo que si no toda la profesión debe de investigar o tener másteres o doctorados, si al menos todos deberíamos de trabajar en la intención de alcanzar los mejores resultados en salud. Y en esto las enfermeras “teóricas” ayudan a descubrir y las enfermeras asistenciales ayudan a resolver, cuando además la mayoría de las veces, comparten espacios asistenciales para cuidar y aunque otras veces los “teóricos” se hallan apartado de la asistencial, comprendo que no por ello dejan de ser necesarios.
        Por otro lado abarcas un tema delicado “…la nula adecuación de la formación recibida a la ubicación profesional de un determinado profesional…”, y es una cuestión que debe mejorar y evolucionar, necesariamente, claro que para ello es imprescindible el compromiso de los representantes que así lo deben de valorar, de los gestores y de los políticos, para definir esos espacios asistenciales especializados y adecuados a la formación del profesional. Y el ejemplo que cuentas de la baremación en la OPE, relata como de cerradas están las estructuras de vinculación con la profesión, cuando además la formación continuada está muy argumentada (y negociada) desde los sindicatos.
        Muchas gracias de nuevo.
        Un abrazo.

    2. Hola Enfermeromileurista
      Gracias por pasarte como dijiste el otro día que harías. La verdad es que todas las aportaciones están resultando muy interesantes. Referente a lo que comentáis sobre la dificultad que puede encontrar el doctorando que trabaja como eventual en varias unidades diferentes, quizás se podría mejorar o al menos aspirar a ello, si en las plantas asistenciales se abrieran líneas de investigación bien definidas y estructuradas, donde creo que la academia tendría algo que decir o al menos a nivel de continuidad, y de manera que pudieran adscribirse profesionales que allí trabajan sean o no doctorandos, y colaborar en sacar adelante esos proyectos (contando con el apoyo institucional y económico, muy necesario, sobre todo este último). Recuerdo una comunicación de hace días de Jose Miguel Morales que indicaba un aspecto destacable sobre el hecho de “no investigar siempre lo mismo, de manera que se van replicando los mismos estudios muchas veces, con pequeñas muestras aquí y allá”. Quizás estas situaciones se mejorarían si las unidades tuvieran estas líneas abiertas, con participación o no de la academia, que podrían incorporar grupo de profesionales que allí trabajan o están de paso y agrupar recursos humanos y esfuerzos concretos y continuados en el tiempo, para alcanzar resultados en salud y poderlo implementar en la propia unidad.
      Quizás soy una idealista!
      Un abrazo.

    3. Hola Héctor
      Gracias por pasarte.
      Planteas aspectos novedosos al debate, y realmente parece algo simplista el asunto si pensamos que Enfermería se separa, por un lado en los “teóricos”, como los defines y por otro lado, los “asistenciales”, pero creo que has aportado un planteamiento interesante de razonar y muy necesario para la profesión ¿necesita Enfermería a esos “teóricos” que defines que investigan, publican y aportan corrientes de opinión? o ¿dejamos que sea sola la enfermería asistencial la que saque el trabajo a pie de cama? Yo personalmente creo que esta dualidad es poco optimista para mirar a un futuro profesional con aspiraciones a que no nos digan que hay que hacer, sino que seamos los propios profesionales los que podamos decidir cómo cuidar y cómo hacerlo de la mejor manera posible. Y para ello es necesario que la enfermería “teórica” y la enfermería asistencial trabajen a codo.
      Eso si lo tengo claro, yo opino que si no toda la profesión debe de investigar o tener másteres o doctorados, si al menos todos debemos saber trabajar en la intención de alcanzar los mejores resultados en salud. Y en esto las enfermeras “teóricas” ayudan a descubrir y las enfermeras asistenciales ayudan a resolver, cuando además la mayoría de las veces, comparten espacios asistenciales para cuidar y aunque otras veces los “teóricos” se hallan apartado de la asistencial, entiendo que no por ello dejan de ser necesarios.
      Por otro lado abarcas un tema delicado “…la nula adecuación de la formación recibida a la ubicación profesional de un determinado profesional…”, y una cuestión que debe mejorar y evolucionar, necesariamente, claro que para ello es imprescindible el compromiso de los representantes que así lo deben de valorar, de los gestores y de los políticos, para definir esos espacios asistenciales especializados y adecuados a la formación del profesional. Y el ejemplo que cuentas de la baremación en la OPE, relata como de cerradas están las estructuras de vinculación con la profesión, cuando la formación continuada está muy argumentada (y negociada) desde los sindicatos.
      Un abrazo. Y gracias de nuevo.

  19. cintia borja herrero

    Yo estoy interesada en hacer el Doctorado, no se exactamente porque quiero hacerlo, pero si que tengo la ambición de hacerlo. Me gusta mi trabajo de enfermera asistencial que llevo ejerciendo desde hacer 18 años. Este año pasado hice la adaptación al grado, y la anécdota graciosa pero que a la vez dice mucho de como nos consideran la gran mayoría de nuestros compañeros/as médicos os la voy a contar para que vosotros mismos juzguéis.
    Para obtener el grado de enfermería tenia que presentar un proyecto de investigación, así que elijo uno que tenia en mente desde hace tiempo hacer. Mi proyecto necesitaba pasar por el comité de ética e investigación clínica del departamento donde trabajo. Así que manos a la obra, hago el diseño según las normas de dicho comité y lo presento. Al mes de presentarlo me contestan que debo incluir unas alegaciones que se me piden, por supuesto las incluyo y un mes mas para que me contesten, cuando lo hacen me piden mas aclaraciones. Harta de ello, hago que el trabajo sea revisado por una compañera medica y experta en investigación. Su respuesta fue que no le veía ningún problema que el diseño a su parecer era correcto, no obstante me remite a un compañero epidermiologo que antes formaba parte de dicho comité. Esté lo revisa, me hace cambiar una frase de todo el diseño, y me dice, que él, lo que haría seria hablar con el presidente del comité, pues no ve el porque no me lo han aprobado.
    Así que rectifico la frase y pido hablar con el presidente del comité. ¿Sabéis que me dijo este?, que si que el diseño estaba bien, pero que, bueno, para ser un trabajo de fin de grado de enfermería no era necesario tanto, y que no me preocupara que lo presentara que esta vez si lo aprobarían. Que sorpresa, su contestación. Así que aspire hondo y con toda humildad le dije que agradecía el que ahora pasara, pero que me daba igual que fuera de enfermería que si el comité valoraba que no debía de ser aprobado por lo que fuera, que por favor la enfermería en general estaría agradecida en que no fuese aprobado.
    Con ello quiero decir que como profesional sanitario quiero estar donde me corresponde, que tengo una formación, y si esta no esta a la altura quiero que se me exija, lo que no quiero es ser personal sanitario de segunda.
    Estoy cansada de tener que demostrar, por culpa de profesionales que se han quedado con la ciencia que adquirieron cuando se formaron sin continuar estudiando, investigando, pensado que para qué, que como ya tienen tantos años de practica profesional ya tienen suficiente. La enfermería es una profesión dinámica, y me encanta ver gente como en este foro que se preocupa de saber mas, y no se quedan con la ciencia infusa.

    1. Hola Cintia:
      Gracias por comentar. Enhorabuena por tu decisión de hacer el doctorado y mucha suerte en tu proyecto de tesis. Seguro que te ayudará a continuar la línea de investigación como comentas que has iniciado.
      Lamento tu mala experiencia con el Comité de Ética de investigación, la verdad es que desde mi experiencia (formo parte del CEI de mi hospital, y hay además dos compañeros enfermeras/os más junto al resto de facultativos y otros miembros) asumimos la valoración/evaluación de los aspectos éticos de la investigación, pero por ley se le exige también al CEI, que debe valorar/evaluar y recomendar mejoras metodológicas de los proyectos de investigación, ECA, estudios posintervención… en la intención de garantizar una investigación rigurosa y ajustada al marco legal. Desconozco la dinámica de ese CEI, pero en nuestro caso los trabajos se adjudican desde la secretaría y si hay algún aspecto que generan dudas a los revisores, se debaten en la reunión mensual y te aseguro que allí no se minusvalora el trabajo de una enfermera, pero ni de un ECA, evidentemente la revisión de un ECA genera mucho trabajo de evaluación comparado con algunos proyectos de investigación, pero nunca he apreciado menoscabo.
      Ya se venía haciendo, pero a partir de ahora, obligatoriamente, toda investigación que se haga en Andalucía debe pasar por el CEI, Tesis, TFG, TFM, ECA, Proyectos de investigación… etc, luego no podemos establecer diferencias, ni restar valor a cualquier trabajo que tiene que obligatoriamente pasar por el CEI.
      Lo que si se debe exigir (por ley) es la presencia de enfermeras en los CEI, y que estas trabajen en el apoyo de la investigación en Enfermería desde el rigor. Desconozco porque el presidente te aportó esa palmada paternalista, quizás al amparo de su mirada biomédica, pero tu interés, deseos de seguir formándote, y dedicación para hacer la investigación y alcanzar conclusiones es lo valorable, quédate con eso.
      Me alegra que te guste este foro, y encantada de establecer diálogo al respecto.
      Gracias por pasarte. Un abrazo.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.